Cuando era pequeño

Siempre he recordado con cariño aquellos momentos que pasé en casa de mi abuela. Ahora que ya está viviendo en mejores condiciones, siempre que paso por delante de su casa recuerdo aquellos instantes de felicidad suprema que pasé junto a ella, y me llena de honda satisfacción el pensar que su casa está en buenas manos, cuidada, y que por tanto ayuda a toda la familia a salir adelante, que muchas veces se trataba un poco de todo eso y no de otras cosas, por eso me siento bastante seguro con el tema de los alquileres, que siempre es algo a tener en cuenta con estos temas.

Más allá de lo que pensamos que podría ser una buena solución para todos aquellos elementos que teníamos en mente, tener la seguridad de que todo va bien es algo bueno y más en esta vida que está llena de cosas malas y que son imposibles de controlar de forma acertada. Sin duda, es una forma diferente de ver las cosas, pero creo que vale la pena.

En la memoria deben quedar aquellos años en los que mis mayores problemas eran que teníamos para cenar en casa o si mis amigos estarían en la plaza, o quien tenía la pelota para jugar a fútbol en la calle. Todo cambia, ahora la hipoteca, los hijos y la crisis tienen toda mi atención, y poco a poco me deshago de todos aquellos recuerdos que nos quedan en lo más profundo de mi ser, que tiene ganas, por momentos, de volver a aquellos maravilloso años en los que los problema eran, pues eso, niñerías.